La brotación es la primera fase de vuelta a la vida de nuestras cepas en Viña Lanciano. Con carácter previo a ella, vemos en las plantas un lloro que nos indica el inicio que por la cepa comienza a fluir la savia, dando lugar a nacimiento de los brotes, que indican el comienzo de una nueva añada y de un nuevo ciclo de vida para nuestras plantas.
Veremos en los sarmientos que surgen los pámpanos que pronto se convertirán en hojas. Durante este periodo de primavera en Viña Lanciano procuramos limpiar el terreno de malas hierbas, procuramos remover la tierra y ventilar el terreno con el fin de evitar la proliferación de insectos nocivos que puedan atacar nuestra viña. Este procedimiento natural de acondicionamiento del viñedo es un tratamiento preventivo que nos permite reducir o eliminar el uso de productos químicos para el cuidado del viñedo.
Sin duda es un trabajo laborioso pero al que dedicamos esfuerzos que al final del ciclo de vida de la vid, nos permitirá recoger un fruto más sano y natural.
En Viña Lanciano el lloro de marzo pronto comienza a desarrollarse en un brote debido al terreno pobre y pedregoso que favorece la retención de temperatura aportada por los primeros rayos de sol de la primavera, lo que favorece la brotación.
Es un periodo de ilusión que en Bodegas LAN vivimos todos los años, como el inicio de la nueva vida que desembocará en una nueva añada, nuevas sensaciones, inquietudes sobre las heladas, la lluvia, la sequía, la impaciencia en la vendimia, sensaciones que se repiten cada año y que dan sentido a nuestros vinos y a las vidas de los que formamos parte de la familia de esta bodega, pegados a la tierra que nos regala cada año vinos únicos, en Viña Lanciano.