Son innumerables las labores que muchísimas personas realizan a diario para dar forma a cada uno de los vinos que componen nuestra gran familia. Interminables horas de trabajo en la viña, entre depósitos, barricas, botellas, etiquetas…
Nos llena especialmente de orgullo hablar de nuestro LAN Crianza porque en él ponemos gran parte de nuestro esfuerzo. Una selección de viñedos de Rioja Alta y Rioja Alavesa vendimiados manualmente dan origen a nuestro vino más célebre. Tras la fermentación y cuidada maceración, damos paso a la crianza en barricas mixtas (roble americano en las duelas y roble francés en los fondos) que le aportan signos de identidad únicos y en cuya investigación y uso hemos sido pioneros.
A ese período mínimo de 12 meses en barrica le siguen unos 9 meses de afinado en botella. Es un plus que le otorga una gran finura.
Todos estos factores convierten a LAN Crianza en un valor seguro, del que todos en LAN estamos orgullosos, es nuestro vino más versátil encajando con multitud de platos y en cualquier momento.
Disfrutamos cuando vemos nuestro LAN Crianza abierto en las mesas de medio mundo hablando el mismo idioma, en las barras de los bares de barrio entre aquellos que festejan la vida, instante a instante. En esos momentos únicos habéis encontrado un hueco para nuestra etiqueta roja. En esos días en familia, para las comidas en que no te quitas el delantal, en las tardes de barbacoa, en esas cenas de pareja o con buenos amigos, nos habéis dejado entrar y prometemos no dejaros nunca. Nos gusta veros reír, nos gusta brindar con vosotros, nos gusta teneros cerca y veros disfrutar… con LAN Crianza.
Es la mejor recompensa a nuestro trabajo.
Saber premiarse cada día… es #MuyLAN.