Si hay una variedad que representa a Rioja esa es la Tempranillo. Su nombre proviene de una de sus características, ya que es una uva de maduración temprana. Es la más extendida, la que mejor se ha adaptado a suelos y clima y ha perdurado a lo largo de los siglos resistiendo a las importantes plagas como la filoxera de finales del XIX. Con intensos aromas de fruta roja, así como notas de regaliz con toques florales, sus taninos son suaves, por lo que proporcionan vinos muy agradables al paladar, equilibrados y con buena acidez. Con esta base, conseguir que cada vino exprese su propia particularidad depende no solo de nuestra manera de entender el trabajo en el viñedo sino también del que realizamos en la bodega. Estos son los tres vinos que expresan la singularidad de LAN en la búsqueda de nuevos matices.
Manteniendo antiguas tradiciones riojanas: LAN D-12
Una antigua tradición de los viticultores riojanos consistía en reservar su vino favorito para los momentos más especiales. LAN D-12 representa un tributo al depósito de descube número 12, al que nuestros bodegueros de siempre, Paco y Chuchi, destinaban los vinos que destacaban por sus cualidades sobresalientes. Una selección que llamamos hedónica, puesto que se lleva a cabo según las cualidades organolépticas del vino —color y aroma—, una vez terminada la fermentación alcohólica y antes de la maloláctica.
Volviendo la vista al viñedo: LAN Xtrème
LAN Xtrème es nuestro vino ecológico que materializa el respeto a la materia prima, con la mínima intervención desde su origen, y a todo su entorno natural. Desde el inicio de nuestra trayectoria, hemos tenido presente que “la enología comienza en la viticultura” y con este vino lo hemos llevado al extremo, desde su génesis, con la selección de una parcela que por su ubicación favoreciera el cultivo ecológico en una de las faldas de nuestro viñedo.
Innovando en la crianza: LAN 7 Metros
La última innovación de LAN es la crianza en barrica de roble español (Quercus pyrenaica). De unos pocos ejemplares de este tipo de roble, seleccionados uno a uno, por su porte excepcional, con un tronco limpio de ramas y nudos de al menos 7 metros, proceden las barricas seleccionadas para la crianza de LAN 7 METROS. Un vino 100% Tempranillo, que busca el perfecto equilibrio entre fruta y madera, aportando nuevos matices. Una apuesta por la innovación en la crianza, seña de identidad en LAN desde hace ya dos décadas.